#panagenda4good: Bienvenidos a la “Danza de los Vampiros”

¡Llevamos la "escuela Hans Radl", que fue fundada hace 50 años por un veterano de guerra discapacitado llamado Hans Radl a la "Danza de los vampiros"! Hans notó que los niños con discapacidades físicas tenían una gran necesidad de una escuela que satisficiera sus requisitos especiales. Los niños en sillas de ruedas, por ejemplo, necesitaban una escuela con rampas y ascensores. panagenda se enteró de la escuela a través de la iniciativa de Katrin Hermann. Elogiamos mucho el trabajo que hace y estamos particularmente impresionados por su compromiso de aumentar la igualdad de oportunidades para sus estudiantes. Tuvimos el honor de cumplir uno de sus deseos de asistir a un evento cultural event con los estudiantes y quedaron abrumados por su entusiasmo.

Viena tiene que ver con el teatro. Vivir aquí es una gran cosa ya que ofrece muchas posibilidades. Brinda la oportunidad de sumergirse en otro mundo. Puedes identificarte con los personajes o incluso encontrar un nuevo lado de ti mismo. Al hacerlo, tus pensamientos pueden volverse locos en un mundo fantástico libre de las restricciones de la realidad. Los jóvenes de nuestra clase están en una edad en la que miran hacia el futuro. A menudo, para encontrar el camino menos transitado, por así decirlo. Esta pieza en particular, “Dance of the Vampires”, retrata muchos problemas a los que se enfrenta este grupo de edad: independencia, prueba de límites, deseo, peligro, amor. Para muchos de los estudiantes, esta fue la primera vez que asistieron a un event. Y creo sinceramente que a los jóvenes se les debe dar la oportunidad de tener este tipo de experiencias.

Estaban absolutamente asombrados. La hermosa ubicación, el impresionante escenario, el espectacular vestuario, la máscara, la música de Jim Steinman y su energía en general, fue simplemente fantástico. Tan pronto como terminó, los estudiantes querían volver a verlo de inmediato. Estaban completamente encantados con este mundo, que les despertaba muchas emociones. Permitirles ver lo fascinante y emocionante que puede ser ir al teatro era exactamente lo que esperaba. También se dieron cuenta de la importancia de “fregar” como señal de respeto. Definitivamente podrías llamar a la experiencia aprendizaje holístico, especialmente considerando que ir al teatro es una rareza.

Mencioné anteriormente que considero que la capacidad de deslizarse en otros roles es muy importante. Fortalece la conciencia emocional y social, virtudes que son importantes en este mundo. Brindar esta oportunidad de expandir su imaginación, de sumergirse en una experiencia fuera de este mundo, podría incluso alentar a uno u otro a aspirar a más. El arte tiene mucho que ver con la libertad. La libertad de expresión, la libertad de desear, ambas a menudo descartadas como imposibilidades. La identidad también juega un papel importante. Para identificarse con los demás y encontrar puntos en común, para reconocer la humanidad en los demás. Casi se podría decir que es un despertar a la tolerancia. Al mismo tiempo, el arte debe estimular la contemplación, el afecto, la repugnancia, qué tienen que ver estas cosas conmigo. Debe disuadir de pensar solo en blanco y negro, sino también en lunares, rayas, cuadros y, por supuesto, todo lo demás.

Ser docente no solo significa transferencia de conocimiento. La vida escolar incluye mucho trabajo social, gestión de conflictos, aceptación de puntos de vista y transmisión de estructura y claridad. Es importante ayudar a los silenciosos a salir de su caparazón mientras se reconoce a los ruidosos y se les muestra que no serán olvidados si no son el centro de atención. Atención, transmitir optimismo, afirmación de vida y posicionarse claramente como contrapartida clara pero también como compañera. Tan pronto como estas cosas son una segunda naturaleza para mí y los estudiantes las aceptan, tengo una base para enseñar. La clase comienza cuando los estudiantes envían sus libros de comunicación, una forma en que los padres pueden compartir cualquier inquietud que puedan tener. Mantener la relación escuela/familia es importante para nosotros. La jornada continúa según el horario, por lo que los alumnos no están en clase cuando asisten a las sesiones de asesoramiento que nuestra escuela ofrece a lo largo del día. Ponerse al día con las lecciones perdidas es más fácil debido a que nuestras clases son más pequeñas. El beneficio es poder establecer una relación más cercana con cada estudiante y brindarles una atención individual.

Transmitir conocimientos y valores. Teniendo en cuenta que trabajamos con niños y jóvenes, podemos limitar nuestras tareas a la transferencia de conocimiento. Para vivir una vida plena, es necesario comprender los valores principales. La educación que vale la pena sólo funciona a través de una relación sólida. Tengo que ver al niño como un todo, conocer su historia y desarrollarme a partir de ahí. Todo lo que decimos, debe confirmar lo que enseñamos. El arte también transmite valores y emociones. Equilibrar pros y contras, ampliar horizontes a través de la disposición a escuchar y luchar por objetivos comunes son muy importantes. El respeto y la comunicación son, por supuesto, también factores determinantes. Un toque de humor y despreocupación tampoco vienen mal a la hora de motivar a los alumnos. Mi objetivo es un enfoque equilibrado que desafíe pero también aliente a los estudiantes. La cooperación positiva con los padres y su interés en el niño son una gran ventaja a este respecto. Igual de importante es el aprendizaje social. La solidaridad en un grupo promueve mucho el bienestar. Todos aprenden mejor en un ambiente pacífico y afectuoso. Todos los niños deben sentirse bienvenidos y seguros en la escuela.

Mi consejo es que nunca seas indiferente. Todo lo que sirve a la educación también sirve a la paz. Ya sea que se tome el tiempo para leerle a un niño oa un residente en un asilo de ancianos, ya sea que patrocine una clase para visitar el teatro, todo tiene el mismo propósito. Permiten momentos memorables. Unos de gran valor. Aumento de la autoestima. Todo lo cual conduce a una paz interior. Ayudar requiere tiempo, compromiso, atención y sí, a veces también dinero. Si cada uno da un poco, en total es mucho. Si miras conscientemente alrededor de tu entorno y escuchas, también encontrarás algo en lo que puedas contribuir.